Saltar al contenido

Diferencias entre convenios y contratos

Diferencias entre convenios y contratos

Puede parecer sorprendente, pero los contratos y convenios son elementos que forman parte de la vida cotidiana de las personas en todos los sentidos. Ya que buscan desarrollar un bien común en todos los participantes, tanto de la parte legal cómo la interpersonal, independientemente de su situación jurídica. Esta cercanía puede traer confusión sobre estos conceptos, porque vamos a hablar de sus diferencias.

¿Qué son los convenios y los contratos?

Basándose en el contexto y el marco en que ambos se desarrollan, es posible ver a simple vista las diferencias que existen entre los contratos y los convenios, por lo que vamos a hacer un pequeño repaso a las funciones de cada una:

  • Convenios: Son acuerdos que se desarrollan entre dos o más partes sobre un asunto en particular, en el cual se pactan ciertos términos y condiciones que los involucrados declaran conocer y hacer cumplir. Los alcances e implicaciones del mismo pueden variar dependiendo la gravedad de la situación sobre la que estén negociando.
  • Contratos: Son acuerdos de carácter jurídico donde dos o más partes se comprometen a cumplir y respetar una serie de condiciones de manera recíproca, teniendo una vinculación por escrito en la que participan varias figuras de autoridad legal para acreditar la seriedad del documento.

Diferencias entre los convenios y los contratos

La principal similitud entre los convenios y los contratos, y por lo que muchos pueden llegar a confundirse. Es que ambos son acuerdos hechos entre dos o más personas, aunque ambas tienen características diferentes. Algunas de las diferencias más notables entre ambas son las siguientes:

  • Un convenio puede surgir de cualquier tipo de evento, incluso desde los más banales, mientras los contratos van hacía un ambiente más laboral.
  • La estructura de los contratos es similar a cualquier tipo de documento escrito, incluyendo su desarrollo, título, y demás. Mientras que los convenios son mucho más improvisados y no tienen un orden totalmente definido de sus partes.
  • Por lo general, los convenios suelen ser acuerdos que se dan de forma verbal, y los contratos. Aunque algunos pueden llevarse a cabo de la misma forma, suelen ser de carácter escrito donde se pacta el acuerdo al que han llegado en un documento.
  • El incumplimiento de un contrato puede ser sancionado por la ley, desencadenando en sanciones económicas cómo multas e incluso una estadía en prisión, dependiendo la gravedad del asunto. Situaciones que no ocurren en los convenios al no requerir de ningún tipo de compromiso legal.
  • Los convenios suelen tener sus condiciones acordadas, normalmente, acordadas por las personas involucradas. Mientras que los contratos, al ya encontrarse en un marco más legal, requieren un apoyo que cuidan más los detalles.
  • La diferencia más obvia entre los convenios y contratos es, cómo pueden suponer, su naturaleza. Pues, mientras los convenios son más informales y pueden llevarse a cabo en distintos contextos. Los contratos son más formales, y tiene un proceso más complejo.